Los Pilares de Heracles| Capítulo 1 | "Critias".

 Por: Redacción.

Título: "Los Pilares de Heracles: En busca de un imperio milenario".

Autor: Eduardo García.

País: México.

Año: 2020.

Capítulo 1: "Critias".

Tienda: Los Pilares de Heracles en Amazon.

CAPÍTULO ANTERIOR:

CAPÍTULO UNO

-CRITIAS-

El mito de la Atlántida surgió gracias a dos de los famosos diálogos de Platón, llamados Timeo y Critias que hablan sobre una mítica sociedad utópica, la madre varias de las civilizaciones más importantes de la historia, la Atlántida es un punto de unión de varias mitologías como lo son la griega, la egipcia e incluso a la maya, todas estas podrían estar conectadas con la que fuera la sociedad más avanzada de su tiempo, pero ¿cómo es esto posible? ¿por qué de la noche a la mañana la Atlántida desapareció sin dejar ningún vestigio de su existencia?

PUBLICIDAD

En sus diálogos, el famoso filósofo Platón sitúa a la Atlántida como una isla que está más allá de Los Pilares de Heracles, nuestra aventura comienza por precisamente aquí, los historiadores e investigadores han llegado a la conclusión de que Platón se refería a lo que conocemos hoy en día como el estrecho de Gibraltar, la puerta del mar Mediterráneo por el oceáno Atlántico, en la actualidad, es el punto de unión entre Marruecos, España y el Reino Unido, por lo que, la ciudad perdida de la Atlántida debería de estar inmersa en el océano Atlántico, entre Europa y América, o al menos, es lo que creen la mayoría de los estudiosos, según el propio relato de Platón, la isla tendría la misma superficie que Libia y Asia Menor juntas, un tamaño colosal.

PUBLICIDAD

La isla era por demás extraña, su geografía era bastante peculiar, Platón la describe como una isla central que estaba rodeada de un anillo de agua, después uno de tierra, seguida de un segundo de agua y, finalmente, uno de tierra, el anillo más grande y lejano de la isla central que estaba coronada por un espléndido palacio, todo esto rodeado por un gigantesco océano, el Atlántico, que tomaría su nombre en base a este mito.

PUBLICIDAD

Por toda la Atlántida se podrían encontrar estatuas de toros, lo que era el emblema de la ciudad, como ahora los países adoptan un animal para convertirlo en su emblema nacional, en el caso de la Atlántida, eran los toros, pero, esto no era mera casualidad, debía de haber alguna historia, probablemente un mito que hiciera que el pueblo atlante se identificara con estos animales.

PUBLICIDAD

Cuenta la leyenda que la civilización atlante era la más avanzada de su tiempo, incluso, más avanzada que algunas civilizaciones venideras, la Atlántida fue fundada por los hijos de uno de los dioses más importantes de toda la mitología griega, el poderoso dios de los mares, Poseidón, si algo caracterizaba a este dios era la manera en que destruía ciudades enteras hasta desaparecerlas y no dejar ni un solo rastro de ellas, tal vez eso pudiera explicar el apocalipsis atlante.

PUBLICIDAD

Un antiguo mito griego nos cuenta una disputa entre Poseidón y la diosa Atenea quienes peleaban por hacerse del dominio de la ciudad de Atenas, hoy en día, la capital de Grecia, al verse derrotado ante su rival, Poseidón se enfureció y amenazó con destruir la ciudad con terribles terremotos y tsunamis, pero, gracias a la intervención de Zeus, el dios no destruyó a la ciudad de Atenas ¿acaso la Atlántida sufrió ese destino?

PUBLICIDAD

El relato de la Atlántida es antiquísimo, podría tener hasta once mil años de antigüedad, ¿cómo es que un mito tan antiguo es capaz de ponernos a imaginar y soñar con la Atlántida? La idea de una sociedad avanzada con incontables riquezas y un importantísimo conocimiento nos ha maravillado por siglos lo que nos ha llevado a investigar para tratar de encontrar siquiera un vestigio que nos indique que la sociedad atlante efectivamente existió y no se trata solamente de invenciones de un filósofo que vivió hace más de veinte siglos atrás.

PUBLICIDAD


También te puede interesar:

Échale un vistazo a nuestros libros, ya a la venta en Amazon.

PUBLICIDAD


PUBLICIDAD

Comentarios

Entradas populares